Buenos días!!
Hoy os traigo un bizcocho muy muy jugoso. Es un bizcocho que, además, es de fácil elaboración, y es un éxito seguro; dura unos cuantos días en perfecto estado...si conseguís que no se acabe antes, claro!
La curiosidad de este bizcocho que comparto hoy con vosotros es que en su elaboración no lleva levadura química, sino que lleva masa madre. Sí, habéis leído bien: masa madre! De esa con la que elaboramos esos panes tan deliciosos que os mostramos por las redes sociales.
Y es que, cuando estamos alimentando nuestra masa madre, tenemos que descartar parte de ella. Yo no sé a los demás, pero a mí me da mucha pena tirarla. Así que, dando vueltas y vueltas al coco...me empeñé en hacer algún bizcocho con la masa madre que descartamos.
Mientras tanto, en un curso que hice, me topé con una receta que la incorporaba, aunque no me gustó mucho el resultado. También di con otra receta, de Un Pedazo de Pan (otro blog que os recomiendo si os gusta el mundo del pan), pero ésta era de un bizcocho de zanahoria, y yo quería hacerlo con almendra molida.
El caso es que fueron éstos dos los puntos que me sirvieron como base para elaborar mi propia receta y poder compartirla con vosotros. Para elaborarla, decidí empezar con la cantidad de masa madre que tenía para descartar, por probar, y tuve la suerte de que me salió casi perfecto. Tan sólo tuve que ajustar un poco la cantidad de azúcar ya que se me había quedado un poco "soso" (a pesar de que no nos gustan los dulces con mucho azúcar) y...voilà!
En cuanto al método de elaboración, he optado por seguir los pasos que suelen utilizar los anglosajones, que mezclan por un lado los ingredientes húmedos, por otro los secos, y posteriormente los unen y, sin batir mucho la masa final, la vierten en el molde y al horno. Cómodo, no se ensucia mucho ya que con las varilla manuales y una espátula lo hacemos, y rápido.
Si queréis saber cómo elaborar la masa madre, podéis mirar este enlace de Iban Yarza (dicen que una imagen vale más que mil palabras) y preguntarme todas vuestras dudas, que estaré encantada de ayudaros.
Os animáis a hacerlo?
Sed buen@s!!
BIZCOCHO DE ALMENDRA CON MASA MADRE
Ingredientes (para un molde de 29x13x7 cm):
Húmedos:
180 gr de Masa Madre al 100% de hidratación plenamente activa (*)
150 gr de kéfir
3 huevos camperos
50 gr de sirope de arce
115 gr de aceite suave de oliva
Secos:
150 gr de harina de repostería
100 gr de almendra marcona molida
125 gr de azúcar
1/2 tsp (cucharadita) de bicarbonato
2 gr de sal fina
3 gr de jengibre en polvo (opcional)
Crocanti de almendra para decorar (opcional) o azúcar glass.
(*) Para la elaboración de la masa madre para bizcochos os recomiendo utilizar una harina de poca fuerza.
Elaboración:
Lo primero que tenemos que tener es la masa madre plenamente activa. Para ello, yo suelo sacarla del frigorífico por la mañana, la alimento (1:1:1) y en unas horas ya la tenemos burbujeante y preparada para utilizar.
Forramos el molde con papel de horno y precalentamos el horno a 170ºC con aire.
En un bol, ponemos la cantidad de masa madre requerida y añadimos el kéfir. Con ayuda de unas varillas, a mano, batimos para integral la masa madre al kéfir.
A continuación añadimos los huevos y batimos.
Incorporamos el sirope de arce (os recomiendo utilizar un buen sirope de arce. Afortunadamente, tengo una amiga canadiense que me trae uno ecológico que es una maravilla para el paladar) y el aceite y mezclamos hasta integrar bien el aceite. Veréis que se incorpora de manera fácil.
En otro bol añadimos la harina tamizada, la harina de almendra también tamizada, el azúcar, el bicarbonato, la sal y el jengibre si optamos por incluirlo.
Echamos los ingredientes secos sobre los húmedos y, con la ayuda de una espátula de silicona, los mezclamos. Lo justo para que la harina se incorpore. No debemos batir mucho la mezcla ni tampoco hacerlo enérgicamente para no desarrollar el gluten de la harina que lleva la masa madre.
Vertemos la mezcla en el molde forrado y ponemos por la superficie un poco de crocanti de almendra. Si no ponemos la almendra, lo dejamos tal cual y cuando esté completamente frío podemos espolvorear la superficie con azúcar glass o dejar sin nada, que va a estar igual de bueno. ;)
Horneamos unos 35 minutos a 170º con aire.
Sacamos y dejamos reposar 5 minutos. Desmoldamos y dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.
A disfrutar!!